MÁS EDAD, MÁS MUTACIONES

Investigadores de la Universidad Estatal de Pensilvania han descubierto, tras realizar un estudio, que la edad de la progenitora puede influir a la hora de tener o no ciertas enfermedades. Esto se debe a que el ADN mitocondrial contiene más mutaciones conforme vamos avanzando en edad.
El estudio consistió en la realización de análisis de sangre a 39 parejas de madres e hijos. La edad maternal oscilaba entre los 25 y los 59 años de edad.
Las mitocondrias son un tipo de orgánulo celular que poseen su propio tipo de ADN.
La explicación que dan los científicos encargados de esta investigación es la siguiente: a lo largo de nuestra vida, nuestras células se van reproduciendo y no dejan de hacerlo hasta que morimos, de forma que a más años de vida, más probable es que nuestro ADN adquiera mutaciones.
Han llegado a la conclusión de que estas mutaciones pueden causar unas 200 enfermedades y ayudan también al desarrollo de enfermedades como el cáncer, el Alzheimer, el Parkinson o la diabetes.
Además, debido a que las mitocondrias son los orgánulos encargados de suministrar a las células la energía necesaria para su actividad; estas mutaciones en el ADN mitocondrial afecta a los órganos que requieren una gran cantidad de energía como puede ser:el corazón, el esqueleto o el cerebro.
También han descubierto que el llamado cuello de botella (fase que provoca la disminución del número de moléculas de ADN mitocondrial) por el que pasa el desarrollo de los óvulos es muy pequeño, lo que quiere decir que la disminución del número de moléculas es muy grande. Esta gran disminución provoca que la genética del niño pueda diferir radicalmente de la de la madre.
Estos dos descubrimientos pueden, a partir de ahora, alertarnos de las posibles enfermedades que podrán tener nuestros hijos dependiendo, por una parte, de la edad de la madre y por otra, del tamaño del cuello de botella por el que pasen nuestros óvulos.

Fuente: Los hijos de madres mayores tienen más mutaciones en su ADN mitocondrial

Comentarios