UNA FOTOSÍNTESIS ARTIFICIAL

Un sistema ha sido desarrollado que utiliza la energía excedente de energía de las renovables para convertir el dióxido de carbono (CO2) en compuestos aptos para la industria, como el etileno y el monóxido de carbono. Los desarrolladores, que son de la multinacional alemana Siemens, aún no han logrado recrear todo el proceso de fotosíntesis, debido que para recrearlo a la perfección requiere muchas estructuras complejas e interconectadas difíciles de imitar en un laboratorio. Pero esperan conseguirlo en dos años

Según dice esta compañía no hay una reacción química igual de productiva que la fotosíntesis, un proceso por el que gracias al agua y a la energía solar se convierte el CO2 en energía rica para la planta. Es tan eficaz que han estimado que las plantas son capaces de producir 150.000 millones de energía rica en biomasa en todo el mundo cada año.

Aunque todavía no se ha conseguido recrear el proceso en su totalidad, ya que involucra muchas estructuras de proteínas complejas e interconectadas difíciles de imitar en un laboratorio, los desarrolladores de Siemens acaban de dar un importante paso para hacer realidad la fotosíntesis sintética. Para ello, han creado unos módulos del tamaño de una caja de zapatos donde se pueden simular energéticamente el dióxido de carbono, de la misma forma que en las células vegetales.

El CO2 al activarse puede reaccionar para crear una gran variedad de moléculas como: el etileno, un componente que la industria a química necesita para la producción de plásticos; el gas metano que es rico en energía y el principal componente del gas natural; o el monóxido de carbono, que puede ser utilizado para producir combustible como el etanol.

Este equipo también está desarrollando otras dos investigaciones con al finalidad de conseguir imitar la fotosíntesis a la perfección: Piensan que en vez de intentar capturar la luz, es necesario centrarse en activar el CO2 para poder transformarlo en otros productos, para lo que están utilizando la energía procedente de las fuentes renovables, cuya primera opción es conducir el proceso a través de la electricidad, una opción visionaria es utilizar directamente la luz del sol. La otra investigación consiste en intentar capturar la energía del sol e intentar realizar la fotosíntesis en un módulo de vidrio parecido a células fotovoltaicas.

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