Según un estudio de la Asociación americana para la Investigación del Cáncer, el consumo de un tipo de almidón puede reducir el riesgo de contraer cáncer de colon relacionado con el consumo excesivo de la carne roja.
A lo largo de los años podemos observar como el consumo de carne ha aumentado considerablemente a partir de los años 1960 (incluso se ha duplicado) en todo el mundo.
El almidón y la carne roja tienen efectos contrarios sobre el gen miRNAs, originario del de cáncer de colon y perteneciente al gen miR-17-92.
A diferencia de la mayor parte de cereales, el almidón resistente mejora la digestión en el estómago y en el intestino delgado, y pasa por el colon (intestino grueso) donde desarrolla propiedades similares a la fibra. Este estudio confirma el consumo del almidón como medio para reducir el riesgo asociado a una dieta basada en carne roja.
A diferencia de la mayor parte de cereales, el almidón resistente mejora la digestión en el estómago y en el intestino delgado, y pasa por el colon (intestino grueso) donde desarrolla propiedades similares a la fibra. Este estudio confirma el consumo del almidón como medio para reducir el riesgo asociado a una dieta basada en carne roja.
A diferencia de la mayor parte de cereales, el almidón resistente mejora la digestión por su paso por el estómago, intestino delgado y colon (intestino grueso), donde realiza las propiedades típicas de la fibra.
Como ejemplo de alimentos ricos en almidón resistente encontramos los plátanos, las patatas, los frijoles, garbanzos, lentejas, entre otras.
Los científicos del proyecto trabajan para desarrollar en estos tipos de alimentos niveles altos de almidón resistente.
En el estudio participaron 23 voluntarios en buen estado de salud, 17 hombres y 6 mujeres con edades comprendidas entre los 50 y los 75 años. Los participantes comieron, durante cuatro meses, distintas cantidades de carne roja y de almidón resistente. Después de comer 300 gramos de carne magra roja al día durante cuatro semanas, los participantes del estudio consiguieron aumentar en un 30% más sus niveles de móleculas miR-17-92 en su tejido intestinal y en general una alta proliferación celular. Los participantes, por otra parte, al consumir 40 gramos de almidón resistente al día junto a carne roja durante las cuatro semanas, obtuvieron una reducción en los niveles de esas moléculas en su cuerpo hasta normalizarlos.
En el estudio participaron 23 voluntarios en buen estado de salud, 17 hombres y 6 mujeres con edades comprendidas entre los 50 y los 75 años. Los participantes comieron, durante cuatro meses, distintas cantidades de carne roja y de almidón resistente. Después de comer 300 gramos de carne magra roja al día durante cuatro semanas, los participantes del estudio consiguieron aumentar en un 30% más sus niveles de móleculas miR-17-92 en su tejido intestinal y en general una alta proliferación celular. Los participantes, por otra parte, al consumir 40 gramos de almidón resistente al día junto a carne roja durante las cuatro semanas, obtuvieron una reducción en los niveles de esas moléculas en su cuerpo hasta normalizarlos.
Fuente: http://www.abc.es/salud/noticias/20140805/abci-carne-fibra-cancer-201408041701.html
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