Para la investigación se habría tomado un virus (causante de una pandemia) y se habrían elegido las cepas que el sistema inmunológico no neutralizaba, luego de varias repeticiones en el proceso , Yoshiro, logró crear una maravilla de virus.
Tanto el científico como las autoridades calificaron de "adecuadas" las medidas tomadas en cuanto a la seguridad (el laboratorio tiene un alto nivel de seguridad biológica (nivel 3), según la clasificación de los Estados Unidos, que tiene 4 niveles en total.). A pesar de esto, las cepas de H1N1 estaban en lugares no tan seguros (nivel 2).
No es la primera vez que Yoshiro causa rechazo en la comunidad científica, ya que anteriormente fue tratado de estúpido e irresponsable cuando intentó reconstruir la gripe H1N1 , de 1918 , conocida como la gripe española (que causó una gran cantidad de muertos durante la Primera Guerra Mundial).
Si bien este tipo de estudios mejoran el conocimiento sobre diversos virus y permiten la creación de nuevas drogas y vacunas, es sabido que el riesgo de un accidente biológico está siempre latente, ya que cualquier error podría llevar a la humanidad a una epidemia global de una potente enfermedad.
Entre 2004 y 2006, este científico intentó aumentar deliberadamente la virulencia de la gripe aviar (H5N1) para estudiar la evolución de este proceso.
Cuando el proyecto de Kawaoka se dio a conocer, los científicos presentes quedaron horrorizados por los resultados (un virus casi omnipotente que podría poner en riesgo a la población) y cuestionaron fuertemente dichos estudios.
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