La biotecnología es un conjunto de técnicas que usan seres vivos o moléculas derivadas de un organismo para un propósito específico.
Como ejemplo de aplicación podemos mencionar la modificación genética de plantas para hacerlas más resistentes a plagas.
La inteligencia artificial es la simulación, mediante ordenadores, de comportamientos propios de la inteligencia humana, basado principalmente, en redes neuronales que son modelos matemáticos que simulan las conexiones entre las neuronas del cerebro.
Como ejemplo de aplicación podemos mencionar sistemas que tratan de predecir el padecimiento de ciertas enfermedades buscando patrones en millones de datos.
Pero ¿qué podríamos obtener si juntamos estas dos áreas? Pues seguro que nos esperan avances que ahora mismo no somos capaces ni de imaginar.
Pongamos algunos de los avances que se vislumbran.
Por ejemplo, se pueden desarrollar y simular modelos de interacción de moléculas para estudiar la permeabilidad de las paredes celulares o el comportamiento de enzimas.
También permitirá el desarrollo más rápido de nuevos fármacos, acelerar ensayos clínicos y la medicina personalizada mediante el uso de biomarcadores.
En definitiva un futuro de ciencia ficción.
Fuentes: MerckGroup, ASEBIO
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