PROTEÍNA VS. CÁNCER

Un grupo de investigadores ingleses confirma el descubrimiento de una nueva proteína que puede ser la oportunidad para sanar todos los tipos de cánceres. Esta proteína, actualmente conocida, recarga el sistema inmunitario de manera que pueda enfrentarse al cáncer o a los virus con mayor eficacia. Cuando dicha proteína detecta el cáncer,  lo ataca, provocando la formación de células o linfocitos T. Esta nueva proteína, que recibe el nombre de LEM (molécula de expansión de linfocitos), ocasiona la multiplicación de estas células facilitando el combate contra la infección o el tumor.

Se trata de una forma totalmente nueva de tratar el cáncer, y el próximo paso será desarrollar un tratamiento genético basado en la producción de dicha proteína. Es posible que dentro de tres años se pueda probar este método en humanos.

Además de proporcionar más linfocitos T, esta biomolécula beneficia la creación de las células que se ocupan de que una enfermedad no vuelva a aparecer combatiéndola rápidamente en cuanto la localizan, por lo que se reducen las posibilidades de que el cáncer se reproduzca .

La actividad de los linfocitos T es eliminada por las células cancerígenas, permitiéndolas escapar del sistema inmunitario. En este caso, quieren impulsar la producción de la proteína que crea dichos linfocitos de manera natural.

Los investigadores se encontraron con esta biomolécula al investigar las mutaciones genéticas en ratones. Una de estas provocaba que dichos animales produjesen muchas más células T, convirtiéndolas inmunes al cáncer y otras infecciones. La causante era la proteína LEM. Este descubrimiento da a entender que una terapia genética basada en la producción de más linfocito T puede ser más eficaz y menos peligrosas que los tratamientos actuales, como la quimioterapia.

Se necesita más investigación en animales antes de que los experimentos se realicen con los humanos, pero hay mucha confianza puesta en un nuevo tipo de tratamiento en el que el sistema imunitario detecte y elimine las células dañinas. Dicho tratamiento se basa en la habilidad de la proteína LEM para regular la respiración mitocondrial de unos glóbulos blancos conocidos como células T citotóxicas. Todo esto puede ayudar a entender mejor los mecanismos de las enfermedades como las inflamaciones crónicas, la arteriosclerosis o la artritis reumatoide. Los investigadores necesitan averiguar cómo desarrollar medicamentos que alcancen a esta molécula, y si eso es fiable y seguro para los enfermos de cáncer.

Fuente: ElConfidencial.

Comentarios