LA ENFERMEDAD DE LOS REYES

Hace siglos, la hemofilia fue una enfermedad padecida únicamente por la realeza debido a que los matrimonios se realizaban entre la nobleza. Hoy en día, es transmitida a nivel mundial.

La Hemofilia es una enfermedad que afecta a la coagulación de la sangre ya que se caracteriza por un defecto en alguno de los elementos, llamados factores (proteínas), que se necesitan para que la sangre coagule. Es decir, que teniendo esta enfermedad y no aplicarle tratamiento (inyección del factor que tu cuerpo, o no produce, o no reconoce) nunca cortarías la hemorragia, por muy pequeñas que fueran, podrías llegar a morirte desangrado.

Se puede producir por dos causas:

- Tu cuerpo produzca el factor (proteína), pero que contenga alguna anomalía y no la reconozca.

- Directamente no produzcas el factor.

El tratamiento en ambas es el mismo:

- Introducir el factor por vía intravenosa en el enfermo. (Esto conlleva muchos riesgos y ha traído consigo graves problemas ya que el factor introducido en un paciente, es a su vez el extraído de otro, por lo que puede conllevar problemas de compatibilidad o riesgos de contraer otras enfermedades. Para solucionar este problema se ha llevado acabo con algunos de los factores, el intentar conseguirlo artificialmente por medio de laboratorios).

Hay diferentes tipos de hemofilia según el factor que no se tenga, los más comunes son:

- El factor VIII: Su ausencia produce hemofilia tipo A.

- El factor IX: Su ausencia provoca hemofilia B.

(Dentro de estas dos, existen a su vez:)

                  ·  "Hemofilia grave" (factor continuo)

                  · "Hemofilia moderada" (factor tras algún golpe o riesgo de sangrado)

                  · "Hemofilia leve" (podría pasar sin factor)