El diagnóstico genético preimplantacional se utiliza en las clínicas de fertilidad para detectar grandes anomalías cromosómicas o mutaciones genéticas transmitidas por los padres para sus embriones fertilizados 'in vitro' , pero no es posible analizar exhaustivamente el genoma del embrión para detectar mutaciones espontáneas. Ahora, un equipo de expertos ha desarrollado un enfoque de secuenciación de todo el genoma utilizando biopsias de entre cinco y diez células de embriones humanos para detectar mutaciones que causan potenciales enfermedades.
Científicos de 'Complete Genomics', 'Reprogenetics' y el Centro de Fertilidad NYU, en Estados Unidos, secuenciaron tres biopsias de dos embriones fecundados in vitro en un intento de detectar mutaciones de novo, las que surgen espontáneamente en el óvulo o el espermatozoide y no se heredan de uno de los padres. Se cree que estos tipos de mutaciones dan cuenta de una gran parte de trastornos de retraso mental severo, autismo, encefalopatías epilépticas y otras enfermedades congénitas.
Como sólo entre cinco y diez células pueden someterse a una biopsia de un embrión blastocisto, el ADN se amplifica antes de la secuenciación, un proceso que introduce miles de errores que parecen ser mutaciones de novo. Hasta ahora, ha sido difícil separar los errores de secuenciación de verdaderas mutaciones de novo. Utilizando su método tecnológico los investigadores asignaron fragmentos de ADN en el genoma materno o paterno usando los códigos de barras de ADN y fueron capaces de eliminar más de 100.000 errores de secuenciación, reduciendo la tasa de error aproximadamente cien veces más que los estudios anteriores.
Debido a que cada individuo lleva en promedio menos de cien mutaciones de novo, conseguir detectar y asignar los padres origen de estas mutaciones, que son la causa de muchas enfermedades, es necesario que este tipo de errores sean extremadamente bajos. En general, los investigadores detectaron el 82 por ciento de todos los cambios de novo en los embriones fecundados in vitro, demostrando que una gran mayoría de mutaciones únicas de novo pueden detectarse en una prueba de DPG.
En un embrión, los investigadores no encontraron mutaciones de novo en las regiones codificantes de proteínas del genoma. Sin embargo, en otro otro embrión a partir de la misma pareja, los científicos hallaron dos mutaciones de codificación en los genes ZNF266 y SLC26A10 que pueden ser potencialmente dañinas. Los autores señalan que actualmente se desconoce si habría alguna consecuencia para la salud de un niño nacido con estas mutaciones.
En un embrión, los investigadores no encontraron mutaciones de novo en las regiones codificantes de proteínas del genoma. Sin embargo, en otro otro embrión a partir de la misma pareja, los científicos hallaron dos mutaciones de codificación en los genes ZNF266 y SLC26A10 que pueden ser potencialmente dañinas. Los autores señalan que actualmente se desconoce si habría alguna consecuencia para la salud de un niño nacido con estas mutaciones.
El obstáculo más grande ahora es la forma de analizar el impacto médico de mutaciones detectadas y tomar decisiones basadas en los resultados. Además de DGP, esta nueva metodología podría ser útil para otras aplicaciones en las que las células son limitadas, como la secuenciación células tumorales circulantes o células fetales circulantes, presentes en la sangre en subpoblaciones raras.
Webgrafía:
Comentarios
Publicar un comentario
Gracias por comentar. Te rogamos que seas preciso y educado en tus comentarios.