Un trabajo realizado por Crisp y sus colegas de la universidad de Cambridge no se limita al ADN humano, sino que examinó todos los genomas que componen en cuerpo humano y encontró que es común en los animales encontrar esos tipos de genes pero en los humanos no. En nuestra especie han confirmado que hay 17 tenes que eran sospechosos desde hace tiempo por un origen extranjero y han identificado otro 128 nuevos. Los demás están relacionados con el metabolismo de las grasas y los aa.
Ninguno de estos genes es reciente ya que las transferencias genéticas ocurrieron antes de que la especie humana evolucionara y muchas ellas con los primates.
Los donantes de genes no son sólo las bacterias sino que también son los protistas que son organismos unicelulares eucariotas y virus. Lo cual nos dicta que las baterías no son nuestros enemigos ya que son parte de nuestra lógica más profunda.
Fuente :http://elpais.com/m/elpais/2015/03/12/ciencia/1426166239_909448.html
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