Las proteínas se encuentran en cada célula del cuerpo. Nuestro organismo necesita las proteínas de los alimentos que ingerimos para fortalecer y mantener los huesos, los músculos y la piel. Su función principal es la de fabricar y regenerar todos los tejidos del organismo. Es importante obtener las suficientes a través de la dieta. Su exceso o falta de ellas puede provocar problemas de salud.
Independientemente de la falta de evidencias, el pensamiento de posibles efectos negativos de una dieta alta en contenido proteico en nuestros riñones ha permanecido durante años. Pero ya ha podido ser desmentido gracias a científicos de la Universidad de McMaster.
Tras analizar el efecto de estas dietas no se encuentran diferencias en la función renal de adultos saludables, y se observa que el alto contenido de proteínas consigue aumentar esta función.
Los investigadores realizaron 28 ensayos clínicos que comparaban distintas dietas con varios niveles de proteínas en los riñones y se necesitó un total de 1358 personas sanas, obesas o con diabetes tipo 2 y/o presión arterial, habiendo examinado a su vez la tasa de filtración glomerular (prueba para medir cómo los riñones filtran a sangre y eliminan desechos); dando como resultado 0 enfermedades renales y destacando que todas estas personas consumían dietas altas, moderadas o bajas en proteínas.
Esto, según indican los propios investigadores, implicaría que las dietas altas en proteína no tienen efectos en los riñones: “Simplemente no hay evidencia que vincule una dieta alta en proteínas con la enfermedad renal en individuos”, concluyen.
No obstante, es importante destacar la importancia de asegurarnos de consumir la cantidad de agua necesaria pera evitar estos u otros problemas.
Fuentes: vitónica, ecoticias
Independientemente de la falta de evidencias, el pensamiento de posibles efectos negativos de una dieta alta en contenido proteico en nuestros riñones ha permanecido durante años. Pero ya ha podido ser desmentido gracias a científicos de la Universidad de McMaster.
Tras analizar el efecto de estas dietas no se encuentran diferencias en la función renal de adultos saludables, y se observa que el alto contenido de proteínas consigue aumentar esta función.
Los investigadores realizaron 28 ensayos clínicos que comparaban distintas dietas con varios niveles de proteínas en los riñones y se necesitó un total de 1358 personas sanas, obesas o con diabetes tipo 2 y/o presión arterial, habiendo examinado a su vez la tasa de filtración glomerular (prueba para medir cómo los riñones filtran a sangre y eliminan desechos); dando como resultado 0 enfermedades renales y destacando que todas estas personas consumían dietas altas, moderadas o bajas en proteínas.
Esto, según indican los propios investigadores, implicaría que las dietas altas en proteína no tienen efectos en los riñones: “Simplemente no hay evidencia que vincule una dieta alta en proteínas con la enfermedad renal en individuos”, concluyen.
No obstante, es importante destacar la importancia de asegurarnos de consumir la cantidad de agua necesaria pera evitar estos u otros problemas.
Fuentes: vitónica, ecoticias
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