¿Nos resultaría extraño si dijésemos que es posible el funcionamiento de un avión comercial con la ausencia de JET A1?
A día de hoy, una compañía aeronáutica española es la única que ha propuesto tal cosa, y es por ello que quieren verlo en funcionamiento para 2035.
Esta compañía ha hecho la propuesta con tres prototipos de aviones diferentes, pero todos ellos tienen en común que utilizan el hidrógeno como fuente de energía en vez de el queroseno, debido a su alto grado de contaminación.
A día de hoy, una compañía aeronáutica española es la única que ha propuesto tal cosa, y es por ello que quieren verlo en funcionamiento para 2035.
Esta compañía ha hecho la propuesta con tres prototipos de aviones diferentes, pero todos ellos tienen en común que utilizan el hidrógeno como fuente de energía en vez de el queroseno, debido a su alto grado de contaminación.
El primer modelo sería el llamado diseño de "turbohélice”, basado en modelos existentes y que podría transportar de 120 a 200 pasajeros en distancias de unos 3700 kilómetros, por tanto, serviría para cualquier destino europeo pero no para vuelos trasatlánticos.
El segundo modelo es un avión de turbohélice con propulsión de hélice, basado al igual que el anterior en modelos existentes, que podría llevar hasta 100 pasajeros en distancias cortas y además si fuese a unos 600km/h sería cien kilómetros por hora más rápido que los turbohélices actuales.
Finalmente, el tercer modelo es el que presenta mas diferencias con respecto a los dos anteriores pues el "Cuerpo de Ala Fusionada” es un avión con una sola ala compacta fusionada con la cabina e impulsado con hidrógeno y las alas y además el fuselaje forma una unidad aerodinámica continua.
La empresa española afirma que el uso del hidrógeno, tanto en combustibles sintéticos como utilizado como fuente de energía primaria, tiene un gran potencial en el uso de la aviación comercial y es por tanto que están haciendo lo posible por impulsar los vuelos sin emisiones, los cuales se basan en compensar las emisiones de CO2 (las liberadas y las capturadas) hasta llegar a cero, de ahí que el nombre que reciban los nuevos prototipos aeronáuticos sea: prototipos ZeroE.
Para lograr esta neutralidad de carbono, la Unión Europea ha fijado como fecha límite el 2050.
La utilización del hidrógeno como fuente de energía para las aeronaves no es una idea nueva, pero sí lo es su planteamiento para la aviación comercial, aunque su almacenamiento no es nada sencillo, pues necesita hasta cuatro veces más volumen que el combustible convencional por lo que hay que buscar más espacios y además, el hidrógeno se obtiene a una temperatura de unos -200 grados centígrados y debe comprimirse a altas presiones y por ello es necesario el desarrollo de tanques criogénicos que deberían colocarse en el interior de la aeronave y por tanto se deberían buscar aún más espacios en su interior de esta para ellos.
La transición al hidrógeno como fuente de energía primaria requerirá de un replanteamiento de todo el ecosistema de la aviación comercial, que solo será posible si se recibe el apoyo suficiente de los gobiernos y los proveedores industriales y además los aeropuertos deberán realizar importantes cambios, entre ellos una nueva infraestructura que permita almacenar y repostar el combustible.
Finalmente, el hidrógeno que se utilice deberá ser obtenido de forma limpia a partir de energías renovables.
La transición al hidrógeno como fuente de energía primaria requerirá de un replanteamiento de todo el ecosistema de la aviación comercial, que solo será posible si se recibe el apoyo suficiente de los gobiernos y los proveedores industriales y además los aeropuertos deberán realizar importantes cambios, entre ellos una nueva infraestructura que permita almacenar y repostar el combustible.
Finalmente, el hidrógeno que se utilice deberá ser obtenido de forma limpia a partir de energías renovables.
Fuentes: National Geographic, Deutsche Welle
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