
Pero deberán realizarse nuevas comprobaciones a través del telescopio ALMA para determinar si la detección era de fosfano y cuál es su origen ya Venus no es un planeta amigable para la vida ya que la temperatura ronda los 500 ºC,y es algo asfixiante; luego la presión es insoportable y los ríos de lava y roca fundida moldean el planeta.
Pero Venus podría no haber acabado siendo un planeta sofocante y sin rastro de agua, como es hoy, todo esto se debe a que el gigante gaseoso planeta de Júpiter alteró la órbita de Venus, y esto ocurre por que Júpiter tiene una masa total de dos veces y media la de todos los demás planetas de nuestro sistema solar juntos. Debido a que es enorme, tiene la capacidad de perturbar las órbitas de otros planetas.
Lo que ocurrió fue que al principio de la formación de nuestro sistema solar, Júpiter se acercaba al Sol, y luego se alejaba, debido a las interacciones con el disco de gases del que se forman los planetas gaseosos, entonces mientras tanto, modificó a Venus de una manera definitiva.

Es decir, la nueva órbita de Venus provocada por la influencia de Júpiter colocó al planeta más cerca y durante más tiempo al Sol, que esto hizo que se calentara hasta volverlo el infierno asfixiante y de lava que es hoy, e incompatible para la vida y que posiblemente con el calor perdió el agua que supuestamente había poseído.
Fuentes: Muy Interesante
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