Singapur es el primer país del mundo que autoriza la venta
global de carne de pollo cultivado de la startup estadounidense de tecnología
alimentaria Eat Just.
Este es un avance muy
importante dentro de la industria cárnica, en especial para aquellas empresas
que desean reducir su producción de gases de efecto invernadero, ya que las
vacas producen una gran cantidad de metano, a la vez que la tala de bosques
para la explotación ganadera resulta aún más dañina en cuanto al efecto
invernadero se refiere.
Por todas las razones anteriores, la producción tradicional
de carne debe reducirse en caso de que queramos acabar con el cambio climático. Como solución a este problema, surge la carne cultivada sin necesidad de sacrificar ningún
animal, ya que se produce en biorreactores a partir de células madre.
Quizá este sea el inicio de un cambio total en el método de
producción de carne a nivel mundial, para así reducir el impacto ambiental de
la producción ganadera industrial, además de crear carne más pura, libre de
químicos y crueldad animal. Para arrojar algunos datos sobre este último hecho,
aproximadamente cada día se sacrifican 130 millones de pollos y 4 millones de
cerdos para obtener carne.
Su precio actual se encuentra muy por encima del de la carne
convencional, debido a la reducida producción de esta carne. Sin embargo, terminará
siendo aún más barata que la normal, por requerir una cantidad
infinitamente menor de agua y terreno, convirtiéndose en un alimento mucho más
sostenible.
Se prevé que para 2050 el consumo de carne aumentará más del 70%, por lo que las alternativas de laboratorio tendrán gran importancia para garantizar el suministro alimenticio. Según la consultora global AT Kearney, para el 2040 la mayor parte de la carne no provendrá de animales muertos.
Fuente: Muy Interesante
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