Una de las causas más frecuentes de muerte al año es debida a esta enfermedad, afirma la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cáncer se convierte en la segunda causa de muerte en el mundo. Solo en España las defunciones atribuidas al cáncer suman alrededor de 400.000 y la prevalencia del tipo renal oscila entre un 2% y un 3% de la población, afirmando con esto que su incidencia es menor entre otros tumores.
Es crucial su temprana detección, ya que presenta un grave inconveniente, no suele presentar síntomas hasta una vez avanzada la enfermedad a otros órganos. Una de las catedráticas de la Facultad de Química y directora del grupo de Investigación Mintota, Pilar Campis Falco, explica en un comunicado la necesidad de nuevos métodos más eficaces que les permitan una detección precoz de la enfermedad y un seguimiento apropiado para esos pacientes.
Además, añaden, que sean asequibles y aplicables a muestras biológicas de fácil obtención, como es la orina. La cual es un medio más manejable para poder determinar la presencia de biomarcadores del tumor maligno.Afirma otras de las catedráticas que han contribuido al estudio, Julia Pérez Prieto, catedrática de la Facultad de Farmacia y directora del Grupo de Reactividad Fotoquímica de la Universidad de Valencia.
Especialmente para cáncer renal y vesical, a día de hoy no existen biomarcadores que permitan un cribado, es decir, un proceso precoz para la detección de una enfermedad, diagnóstico y tratamiento temprano. Contra este problema han usado marcadores celulares pero no se demuestra que mejoren la exactitud predictiva de los sistemas pronósticos actuales, por ello no se recomienda su uso en la práctica del día a día.Pero para el análisis rutinario se han usado marcadores clásicamente definidos que muestran resultados cuando el tumor está avanzado. El cual tampoco se recomienda como sistema diagnóstico rutinario, de ahí la importancia del nuevo método llevado a cabo por el estudio mencionado.
Dicho método se refiere a un técnica in vitro, de la cual, a través de una muestra de orina, se obtiene un extracto de ácido acético que más tarde se añade a una dispersión de nanopartículas de oro, que ayudaran al diagnóstico del tumor maligno. El nivel de dispersión de estas partículas, incluido por el extracto de acético, se compara con los niveles de dispersión en muestras de pacientes sanos o pacientes con tumores.
Este método es una herramienta sencilla y no invasiva que podría implantarse como diagnóstico en un punto de atención cerca de los pacientes y con una rápida entrega de los resultados.
Fuentes: 20 Minutos, UV
Comentarios
Publicar un comentario
Gracias por comentar. Te rogamos que seas preciso y educado en tus comentarios.