OMEGA-3, ¿VENENO PARA TUMORES?

Los ácidos grasos omega-3 son un tipo 
Desintegración de tumores a partir de DHA
de lípido, grasas poliinsaturadas. Este
tipo de ácidos grasos no pueden ser
sintetizados por el organismo, por lo
tanto, deben ser añadidos a la dieta, a través de pescados y vegetales. En este caso, se ha descubierto que un tipo de omega-3 el DHA (presente en el pescado) es capaz de matar células tumorales.

El ácido docosahexaenoico (DHA) es imprescindible para la función cerebral, la visión y la regulación de los fenómenos inflamatorios. Y actualmente está vinculado con la destrucción de células tumorales, en un reciente estudio realizado por un grupo de investigadores en la Universidad de Lovaina. Investigaron el comportamiento de distintos ácidos grasos sobre los tumores, y obtuvieron resultados opuestos, es decir, por un lado había algunos tipos de ácidos grasos que estimulaban su crecimiento y otros los mataban.

El DHA actúa como un veneno sobre estos, a través de un fenómeno denominado “ferroptosis” un tipo de muerte celular ligada a la peroxidación de ciertos ácidos grasos. Cuanto mayor es la presencia de ácidos grasos insaturados en la célula, mayor es su oxidación.

Normalmente los ácidos grasos son almacenados y están protegidos de la oxidación, pero en este caso, debido a la enorme cantidad de DHA, la célula se desborda y le resulta imposible almacenar todo el DHA, haciendo así que este se oxide provocando como consecuencia una muerte celular.

Realizaron un estudio cultivando células tumorales en 3D denominadas esferoides, y lo que ocurrió fue que en presencia de DHA en un principio estas iban creciendo, pero terminaban colapsando. También se realizó un experimento empleando ratones con tumores, donde se llegó a la conclusión de que el crecimiento de los tumores de aquellos ratones que presentaban una dieta rica en omega-3 se iba ralentizando. Mientras que por otro lado, aquellos que seguían una dieta convencional avanzaban a un mayor ritmo.

Como conclusión, el ácido omega-3 ha sido añadido como un posible tratamiento eficaz y seguro en la lucha contra el cáncer. Los científicos recomiendan la ingesta de al menos unos 250 miligramos de DHA al día. El problema es que en nuestra dieta solo aportamos una media de entre 50 y 100 miligramos al día, es decir, por debajo de la ingesta mínima recomendada. El omega-3 se encuentra en pescados como el salmón y el atún.

Fuentes: Infobae, La Razón

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