MEDICAMENTO QUE DETIENE EL AVANCE DE UN TIPO DE CANCER DE MAMA

El cáncer de mama, el más frecuente diagnosticado en las mujeres, es una enfermedad que está en constante estudio con la intención de que se desarrollen nuevos tratamientos, tal y como sucedió con el fármaco trastuzumab deruxtecan.

Javier Cortés, director del International Breast Cancer Center (IBCC) y primer autor del ensayo clínico, ha establecido que los resultados de este nuevo estudio sobre el trastuzumab deruxtecan son “los más positivos en la historia” del cáncer de mamá, esto después de que se analizara su eficacia y seguridad.

Para la realización del ensayo clínico de fase III se tuvo la participación de 524 pacientes con cáncer de mama metastásico HER2-positivo. 261 fueron recibieron tratamiento con el fármaco trastuzumab deruxtecan y el resto recibió el considerado tratamiento estándar, con trastuzumab emtansina (TDM-1).

Dentro de los varios resultados arrojados por el estudio, uno de los más importantes, consideraron los especialistas, fue que con el nuevo tratamiento se mejoró el control de la enfermedad de cáncer de mamá en un 75.8% a los 12 meses. En comparación, el grupo de personas tratadas con TDM-1, el control fue del 34.1%.

Respecto a la supervivencia global a los 12 meses, con el trastuzumab deruxtecan fue de un 94.1%, mientras que con trastuzumab emtansina fue de 85.9%.

Otro dato que comprobó la eficacia del nuevo fármaco fue que 42 pacientes (de los 261) tratados con trastuzumab deruxtecan experimentaron una tasa de respuesta completa, es decir, el tumor desapareció totalmente, al menos visualmente.

“Este fármaco es tan innovador y mejora el pronóstico de forma tan llamativa respecto al tratamiento estándar actual que podríamos estar ante el fármaco más activo en la historia del cáncer de mama”, aseguró Cortés.

Dentro de los efectos adversos encontrados con este tratamiento, los científicos encontraron la enfermedad pulmonar intersticial/neumonitis (inflamación pulmonar), pues sus tasas fueron del 10.5% frente a un 1.9% con el TDM-1. Sin embargo, el seguimiento de los pacientes puede permitir detectar y tratar a tiempo dicho efecto.

Respecto a cómo funciona el trastuzumab deruxtecan, este inmunoconjugado, actúa como una especie de “caballo de Troya”, pues evade las defensas de las células tumorales para entrar en ellas y atacarlas desde adentro soltando su carga.

Se administra por vía intravenosa y viaja a través de la sangre hasta las células tumorales, donde reconoce al receptor HER2, que sería la puerta de entrada de dichas células, y entra sin ser detectado, liberando la quimioterapia que lleva sin dañar significativamente a otras células sanas.

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