¿ES EFICAZ LA RESPUESTA INMUNITARIA DE LAS CÉLULAS T CONTRA ÓMICRON?

Cuando se creía que lo peor había pasado, la variante Ómicron del SARS-CoV-2 ha provocado la última ola de la pandemia mundial de COVID-19. Las nuevas mutaciones facilitan la propagación del virus, evitando los anticuerpos, por lo que aquellas personas que ya han pasado el virus o que han sido vacunadas siguen teniendo las mismas posibilidades de contagiarse que el resto. Las células T, por su parte, son células que se forman a partir de células madre en la médula ósea y ayudan a proteger el cuerpo de las infecciones, por lo que se han convertido en esenciales durante la pandemia y por ello han sido estudiadas por muchos científicos.

Investigadores de la Universidad HSE y del Instituto de Química Bioorgánica RAS (Rusia) han demostrado la eficacia de la respuesta inmunitaria de las células T contra la variante Ómicron del SARS-CoV-2. Según las conclusiones del estudio, publicado en la revista Peer, en aproximadamente el 90% de los europeos vacunados, la inmunidad de células T fue tan eficaz contra Ómicron como con otras variantes. 

Según los especialistas, esto puede deberse a dos factores: en primer lugar, la variante Ómicron es más lenta a la hora de infectar las células humanas; en segundo lugar, existe la hipótesis de que el hecho de que la enfermedad actúe con menos agresividad está relacionado con una acción eficaz de la inmunidad de las células T. 

Para confirmar esta hipótesis, este equipo de investigadores rusos estudió la variante Ómicron en busca de mutaciones que le ayuden a evitar la respuesta inmunitaria de las células T. El desarrollo de la respuesta de estas células consiste en el reconocimiento de los péptidos virales con las moléculas del complejo mayor de histocompatibilidad humano (HLA). Cuantos más péptidos se reconozcan, más rápida y eficiente será la inmunidad de las células, por lo que las mutaciones del virus pueden consistir en cambiar dichos péptidos, de tal manera que dejan de ser reconocidos por las moléculas HLA y la respuesta de las células T es menos efectiva.

Gracias a la aplicación de un algoritmo bioinformático, lograron demostrar que la variante Ómicron no evitó ninguna de las variantes de la molécula HLA. La diversidad de la población de estas moléculas, así como la especificidad de su trabajo, no permiten que el virus evite la respuesta inmunitaria de las células T.

Aun así, sigue siendo muy importante la necesidad de profundizar la potencialidad de las células T , que revelan cada vez más funcionalidades respecto del COVID-19.

Fuentes: Infosalus, Infobae, ConSalud