IMPRESIÓN 4D

Seguro que, a día de hoy, para casi todos nosotros es conocida la impresión 3D. Algo que hasta hace unos años era desconocido y reservado para empresas con grandes recursos económicos. Esta tecnología se ha desarrollado y abaratado tanto que hoy cualquiera de nosotros podría tener una impresora 3D que nos permite imprimir piezas e incluso prótesis. Llevado al extremo se usa para imprimir muros de cemento y construir casas, incluso hay quien dice que será la forma en la que se podrá construir en la Luna o en Marte.

Pues si todo esto te asombra llega ahora la impresión 4D. ¿En qué consiste?

La impresión 4D consiste en crear objetos inteligentes en 3D que pueden reaccionar de forma autónoma ante su entorno e interactuar con él.

Superados y conquistados los problemas relacionados con la impresión en 3D, la impresión 4D se centra en los materiales que se usan y sus propiedades. Pongamos algunos ejemplos.

Entre estos materiales contamos con los que cambian su forma cuando se le aplica un campo magnético, o el que cambia sus propiedades eléctricas cuando se deforma o el que se autorrepara de forma autónoma, sin intervención externa.

Quizás uno de los que puede tener una utilidad evidente es el material que cambia de forma en función de la temperatura de su entorno. Podría usarse para extends y tratamiento de dolencias cardíacas cambiando su forma, adaptándose a la realización o no de ejercicio físico por parte del paciente.

Un ejemplo llamativo es de Raúl Pulido Casillas, un ingeniero español, que ha creado para la NASA una tela inteligente con este tipo de impresión. La malla metálica formada por piezas unidas de plata lleva programada en su impresión la regulación térmica que servirá para los trajes de los astronautas o el revestimiento térmico de los transbordadores espaciales.

Algunas de estas impresiones conlleva el hacer la impresión en un estado casi líquido y hacer que el material se solidifique tras su impresión. Científicos de la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M) han creado el software y hardware que lo realiza.

Estos han sido solo algunos de los ejemplos actuales pero quien sabe qué más se podrá desarrollar y, sobre todo, qué aplicaciones se les podrá dar y de qué forma podrán mejorar nuestra vida, por ejemplo al aplicarlo a la nano robótica, nanotecnología para medicina y biomedicina. El límite será nuestra imaginación.

Comentarios